Un día malo, una semana mala, un mes malo

Habrá que seguir sonriendo. No está siendo una buena temporada. Hoy he cancelado el concierto con Roedores para defender los temas del disco yo sólo. Me acompañarán Belén, Cata y algunas amigas, y ensayaremos la semana que viene.
Espero que surja otro concierto más adelante y que sí que estallemos la Sala. Mientras, prefiero quedarme esperando a que sean los músicos quienes lo muevan. Estoy cansado de tirar de ellos, y estoy cansado de pedir favores. Y, lo que es peor, tengo la sensación de que seguirá igual.

Seguramente me incorporaré a un grupo que hay aquí en Sevilla, que no tocan del todo mal pero les faltan ideas. Quizá de allí salga alguna cosa buena. Necesitan bajista y creo que probaré una temporada. Mientras, me inclinaré por seguir dando clases de piano, a ver si así salgo del hoyo en el que me encuentro.

Os pongo la foto de la portada del disco que aún no está aquí colgada.